¡Espera en Jehová!
¡Esfuérzate,
y aliéntese tu corazón!
¡Sí, espera en Jehová!
Salmo 27:14
Esperar y esperar. Realmente no es agradable esperar, especialmente en nuestro mundo que se caracteriza por la inmediatez y los resultados a muy corto plazo.
Ya pasó aquella época en que, por ejemplo, se respetaban los tiempos en la cocina. Las abuelas hacían mermelada, preparaban pasta y hasta el pan se horneaba en casa. Hoy existe eso que llaman "fast food".
En los procesos industriales, en la ingeniería y hasta en la agricultura existe todo tipo de aceleradores de procesos. Pero es quizás, en el mundo de las comunicaciones donde la prisa y la inmediatez han alcanzado sus mayores logros.Ya nadie se sienta a escribir una carta y luego esperar días y días para recibir la respuesta. Hoy tenemos Face Book, e-mail, Twitter, y todo tipo de experiencias comunicacionales digitales e interactivas.
Espera en Jehová. La Biblia nos enseña que Dios no cambia y que es eterno. Podríamos decir entonces que Dios es el Señor del tiempo. Esperar en Él es confiar en su misericordia, es vivir la fe, es entender que como Padre, conoce nuestro sentido de urgencia y al mismo tiempo nos enseña a depender de su misericordia.
Uno de los recuerdos de mi niñez, que hoy me hace sonreír, tiene relación justamente con la espera. Por una parte eramos muchos hermanos y "siempre" mi urgencia no era tal, en comparación con la de alguno de mis hermanos o hermanas. Y cuando finalmente recibía lo que había pedido "siempre" había que esperar. Inolvidable es "el caso de los zapatos nuevos", un verdadero tesoro que apenas podía contener una caja de cartón y ese olor característico del cuero, ¡una delicia!. Pero los zapatos nuevos debían esperar, a veces hasta el día domingo o festivo próximo o, en el mejor de los casos, hasta el lunes siguiente para ir al colegio. Esa espera era ¡insoportable!
Aliéntese tu corazón. El salmista nos invita a una espera activa, ejercitando la fe, dando gracias y esperando pacientemente, en la misericordia y en la sabiduría eterna de Dios.
Imagen
Awaiting his return
Daniel F. Gerhartz
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