Dulce será mi meditación en Él;
yo me regocijaré en Jehová.
Salmo 104: 34
Todo el Salmo 104 es un canto de alabanza a Dios por su creación. El salmista hace un recorrido por cielo, mar y tierra, deteniéndose a reflexionar en el cuidado amoroso que Dios tiene por su creación. Una obra que Dios mismo calificó como "buena", según el relato de Génesis.
Dulce será mi meditación en Él. La misma naturaleza nos ayuda a aquietar los pensamientos, entrar en el sosiego del alma y así finalmente, se nos facilita el camino hacia la meditación en nuestro Señor. Se produce el encuentro y el dulce amor de Cristo, que nos sale a recibir, inunda nuestro ser. El siguiente peldaño es el gozo, el regocijo incomparable que nos hace experimentar seguridad, ese sentimiento que aun en las pruebas y conflictos, nos permite tener serenidad.
De la palabra regocijo podríamos decir que si el sufijo "re" significa reiteración; entonces regocijarse en Jehová es volver una y otra vez, a sentir el gozo de descansar en Él. Renovando y fortaleciendo nuestra vida espiritual.
Dios Todopoderoso sostiene su creación, con mayor razón sostiene nuestras vidas, porque somos sus hijos.
¡yo me regocijaré en Jehová!
Todo el Salmo 104 es un canto de alabanza a Dios por su creación. El salmista hace un recorrido por cielo, mar y tierra, deteniéndose a reflexionar en el cuidado amoroso que Dios tiene por su creación. Una obra que Dios mismo calificó como "buena", según el relato de Génesis.
Dulce será mi meditación en Él. La misma naturaleza nos ayuda a aquietar los pensamientos, entrar en el sosiego del alma y así finalmente, se nos facilita el camino hacia la meditación en nuestro Señor. Se produce el encuentro y el dulce amor de Cristo, que nos sale a recibir, inunda nuestro ser. El siguiente peldaño es el gozo, el regocijo incomparable que nos hace experimentar seguridad, ese sentimiento que aun en las pruebas y conflictos, nos permite tener serenidad.
De la palabra regocijo podríamos decir que si el sufijo "re" significa reiteración; entonces regocijarse en Jehová es volver una y otra vez, a sentir el gozo de descansar en Él. Renovando y fortaleciendo nuestra vida espiritual.
Dios Todopoderoso sostiene su creación, con mayor razón sostiene nuestras vidas, porque somos sus hijos.
¡yo me regocijaré en Jehová!
Alberto leyendo
Giovanni Giacometti
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