Muchas son, Señor mi Dios,
las maravillas que tú has hecho.
No es posible enumerar
tus bondades en favor nuestro.
Si quisiera anunciarlas y
proclamarlas,
serían más de lo que puedo contar.
Salmo 40: 5
NVI
Es muy hermoso este verso que parece ser una conversación íntima. En las palabras del salmista se mezclan emociones tan diversas que van de la confianza absoluta al temor reverencial por eso dice Señor mi Dios; continua con asombro y de lo corriente y concreto llega a lo infinito y eterno. Así es el misterio del Amor de Dios. Se expresa de mil maneras y todo es para nuestro bien.
Me parece que más allá del hecho concreto de no poder llegar a contar todo lo que Dios hace a nuestro favor, en el fondo, se encuentra una verdad que no cambia: Dios es eterno, infinito, y es perfecta bondad. Nuestras limitaciones no sólo nos impiden contar sus maravillas sino que además nos impiden llegar a comprender su real dimensión santa y divina. Nuestro Dios y Padre es supremo, soberano y Rey del universo y sin embargo también es muy personal. Todo lo que sabemos de Él se debe a lo que Él mismo nos ha dado a conocer y es maravilloso comprobar que por su bondad infinita, día a día nos sigue mostrando innumerables maravillas.
¡Oh Señor, te alabo por todo lo que Tu eres
y por todo lo que Tú haces!
NVI
Es muy hermoso este verso que parece ser una conversación íntima. En las palabras del salmista se mezclan emociones tan diversas que van de la confianza absoluta al temor reverencial por eso dice Señor mi Dios; continua con asombro y de lo corriente y concreto llega a lo infinito y eterno. Así es el misterio del Amor de Dios. Se expresa de mil maneras y todo es para nuestro bien.
Me parece que más allá del hecho concreto de no poder llegar a contar todo lo que Dios hace a nuestro favor, en el fondo, se encuentra una verdad que no cambia: Dios es eterno, infinito, y es perfecta bondad. Nuestras limitaciones no sólo nos impiden contar sus maravillas sino que además nos impiden llegar a comprender su real dimensión santa y divina. Nuestro Dios y Padre es supremo, soberano y Rey del universo y sin embargo también es muy personal. Todo lo que sabemos de Él se debe a lo que Él mismo nos ha dado a conocer y es maravilloso comprobar que por su bondad infinita, día a día nos sigue mostrando innumerables maravillas.
¡Oh Señor, te alabo por todo lo que Tu eres
y por todo lo que Tú haces!
Ilustración de Jessie Willcox Smith
1 comentario:
He never stop amazing me!!!!
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