Tú, Señor, mantienes mi lámpara
encendida;
Tú, Dios mío, iluminas mis tinieblas.
Salmo 18: 28
El Salmo 18, ya lo hemos dicho antes, es un canto de victoria.
Al margen de cualquier consideración, creo que no hay victoria mayor que conseguir la Luz de Dios, mantener nuestra lámpara encendida con su Luz inefable y sentir que todo está bien.
Este quizás es el sentimiento de Job, al hablar de Dios:
Él descubre las profundidades de las tinieblas,
y saca a Luz la sombra de muerte - Libro de Job (cap. 12)
He escuchado en más de alguna oportunidad que los seres humanos somos "polvo de estrellas", para significar la grandeza del universo cósmico. Puede ser una frase romántica, hasta poética. Para mi es una gran metáfora que nos permite imaginar que si lo somos, nuestro cuerpo opaco, solitario y pérdido en la inmensidad del universo, adquiere una identidad gloriosa, sólo, en la eternidad de Dios, porque Él mantiene nuestra "lámpara" encendida y su Luz nos libera de la sombra de muerte.
Pintura: Luz en cadena
Magda Torres Gurza
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