¡Cuán grande es la bondad
que has reservado para los que te temen.
La derramas en abundancia sobre los que
acuden a Ti en busca de protección
y los bendices ante la mirada del mundo!
Salmo 31: 19
Con esta declaración del salmista podemos medita en la bondad que Dios nos ha mostrado. En mi caso particular, tengo que reconocer que realmente es asombrosa, no se puede medir y no podría describirla, me faltarían unos adjetivos adecuados.
Como todas las bendiciones de Dios y todas sus dádivas de amor, su bondad excede los límites de lo que somos capaces de entender. La vemos en su protección, en la seguridad de nuestra alma, y se extiende a nuestra casa y a nuestra familia.
¡Oh Señor, eres la bondad misma!
Imagen tomada de la web
4 comentarios:
Es muy bello este blog Clarissa.
Concuerdo con las palabras de C.S. Lewis ¿has leído sus libros? Los cuatro amores, Sorprendido por la alegría, El problema del dolor... te los recomiendo.
Veo que has colocado la oración irlandesa, es una maravilla.
Gracias Clarissa por tanto que entregas.
Un abrazo
Beatriz
Siii!!, realmente es la bondad misma!!! Amen!
Beatriz:
Es una inmensa alegría encontrarte acá, querida amiga.
Conozco la obra de C.S. Lewis. Para mi es una gran inspiración, un referente y una gran ayuda; en su momento fueron muy importantes para mi Sorprendido por la Alegría y también Una pena observada.
La oración irlandesa la copie de tu hermoso blog SUREANDO.
Gracias Beatriz por esta visita; es muy significativo para mi.
Un gran gran abrazo
¡Mi querida Gladys!
Te había echado de menos.
Gracias por tu tiempo y todas las muestras de cariño.
Muchas gracias
Un gran abrazo
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