Bienaventurado el que piensa
en el pobre;
en el día malo lo librará Jehová.
Salmo 41: 1
Cuando hemos conocido el amor del Señor, hay una sensibilidad especial por el que sufre necesidad. No es solamente dar limosna, el salmista dice Bienaventurado el que piensa en el pobre queriendo significar que se trata de una verdadera preocupación y un real interés y compasión. Hay una recompensa espiritual para todos los que llevan el amor de Dios al terreno de la acción; hay una bienaventuranza pero además el salmista nos dice que Dios lo toma en cuenta. Pero me parece que no hay mayor recompensa que sentir que podemos mostrar a través de lo que hacemos, algo del inmenso amor que hemos recibido de Dios.
¡Oh Señor, danos hoy verdadera compasión por el que sufre!
Pintura: "Una Mano Amiga"
Eugene de Blaas
Italia
1843 - 1932
2 comentarios:
Me uno a tu súplica, querida amiga.
Un beso.
Muchas gracias Rosita, por tu cercanía y tu amistad.
Un abrazo muy grande
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