Imponentes obras

Fielmente respondes a nuestras oraciones

con imponentes obras,

oh Dios nuestro Salvador.

Eres la esperanza de todos los que habitan

la tierra,

incluso de los que navegan en mares distantes.

Salmo 65: 5

Fielmente respondes a nuestras oraciones. Es verdad que Dios nos escucha y nos responde. Pero hay que reconocer que la oración no es una caja mágica donde depositamos nuestras peticiones y al otro lado aparece lo que solicitamos. Sin embargo se nos permite y se nos impone elevar nuestras oraciones a Dios Todopoderoso: "El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy"

A pesar de que muchas personas nos podrían contar hechos extraordinarios, milagros y prodigios con los cuales Dios ha respondido oraciones concretas; también hay muchos ejemplos donde Dios ha dado una respuesta negativa (recordemos la petición rechazada de Cristo en Getsemaní). 

Con imponentes obras. La obra más portentosa de Dios, es permitir este diálogo desigual que es la oración: por una parte seres incompletos, mezquinos y triviales y del otro lado la eternidad, la perfección, la sabiduría eterna. Una vez más nos encontramos con la misericordia y la bondad, en grado superlativo, que el Señor nos tiene. Esa es la razón por la cual Dios es la esperanza de todos los que habitan la tierra, incluso de los que navegan en mares distantes (y los que vivimos en el extremo de la tierra, 

en el fin del mundo)

Pinturas: Phan Thu Trang

Este mismo verso, en otra versión: "Las Respuestas"