Sea la Luz de Jehová
nuestro Dios, sobre nosotros.
La obra de nuestras manos
confirma sobre nosotros;
si, la obra de nuestras manos
confirma
Salmo 90: 17
Este Salmo 90 es una oración de Moisés. Y es quizás uno de los salmos más sublimes, expresando la trayectoria de la vida humana. En este verso final, da la impresión de que Moisés, habiendo estado gran parte de su vida totalmente al servicio de Dios, espera algo más que la auto complacencia en su propia obra. Desea fervientemente que Dios mismo le de su "visto bueno".
Disponer nuestras manos para Dios es sin duda vivir el Santo Evangelio. Es hacer real hoy, el Reino de Dios, expresando amor con lo que hacemos; entendiendo que todo debe ser hecho "en el nombre del Señor" y "como para el Señor" (San Pablo a los Colosenses)
¡Señor, ilumina nuestro quehacer para saber que contamos con tu aprobación!
Saciar la sed de los humildes
Isabel Guerra
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