Confortará mi alma.
Me guiará por sendas de justicia
por amor de su nombre.
Salmo 23: 3
Este salmo comienza con una de las frases más dulces de todos los salmos: "El Señor es mi pastor".
La amorosa figura del buen pastor expresa con mucha fuerza la protección de Dios pero también hay un sentido de pertenencia, especialmente en la frase "mi pastor".
Cada palabra de este salmo es realmente música en el corazón, en tiempos de aflicción. Cuando el alma está quebrantada, podemos invocar al Pastor de almas que nos restaure. Y Él lo hace. El salmista dice "por amor de su nombre" para significar que no lo merecemos, que es únicamente la misericordia de Dios.
Si nuestra alma no está "confortada", ¿cómo podríamos disfrutar los delicados pastos?
Cuando el alma ha sido restaurada podemos caminar "por sendas de justicia"; pero necesitamos ser guiados porque son caminos poco transitados, apenas unas huellas, estrechas y difíciles a simple vista.
¡Oh Señor, confórtanos hoy, por amor de tu nombre!
"Jóvenes abedules"
Jean-Louis Courteau
Artista canadiense nacido en 1959
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