Las angustias de mi corazón se han aumentado;
Sácame de mis congojas.
Mira mi aflicción y mi trabajo,
y perdona todos mis pecados
Salmo 25: 17,18
Para mi es muy significativo que el salmista exprese su angustia y pida perdón.
Nuestras faltas, nuestras faltas a la ley moral de Dios, nuestras desobediencias, nos separan del amor de Dios y esto nos produce angustia. En ocasiones caemos en este círculo, casi diría que nos deslizamos por él.
Pero Dios y su generoso y eterno Amor está disponible para tender un puente que restituya nuestra relación con Él. Ese puente es el Perdón.
Para mi el perdón comienza con la decisión y la voluntad de pedir perdón, en algunos casos, o perdonar si es necesario.
Jesús nos enseñó a orar "perdónanos a si como nosotros perdonamos..."
Retrato
Archibald Motley
1 comentario:
Me parece muy interesante el siguiente comentario:
"Es a causa de la enfermedad del alma que Dios nos visita con la enfermedad del cuerpo. Su objetivo es curar el alma al tocar el cuerpo...
Los médicos, aunque afligen a sus pacientes con mucho dolor, no destruyen la naturaleza humana, sino que la mejoran gradualmente. Los cirujanos abren la herida con "lanceta" y cortan, pero no para desmembrar. Una madre con un hijo enfermito y obstinado no por esta razón lo desecha. ¿Habrá, pues, más misericordia en el arroyo que en el manantial? ¿Creeremos que en nosotros hay más misericordia que en Dios, el cual siembra la misma en nosotros?" Richard Sibbes
(Richard Sibbes es mencionado muchas veces por Charles Spurgeon en su comentario de los Salmos "El Tesoro de David")
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