Mas Tú, Jehová,
eres escudo alrededor de mi,
Mi gloria, y el que levanta
mi cabeza
Salmo 3:3
Una de las figuras más simbólicas en relación con la protección de Dios es "Escudo". Este Escudo es un arma poderosa de defensa y protección. Provee un "lugar" seguro, un refugio en medio de la contingencia diaria. Sin estridencia, sin aspavientos, sin alardes de grandeza, estamos a salvo bajo el escudo protector que es Dios mismo. Nos sometemos a su soberanía y majestad y entonces quedamos cubiertos por su gloria. No hay razón para estar abatidos.
Levanta mi cabeza. Cuando estamos afligidos emocionalmente o espiritualmente, el cuerpo también lo expresa con desánimo y decaimiento. Pero Jehová es quien da la victoria. En nuestras pequeñas o grandes luchas diarias, aquellas cotidianas y triviales o las otras, las luchas espirituales; Él es quien nos levanta con victoria.
Cuando Él levanta nuestra cabeza, todo el mundo a nuestro alrededor lo puede ver.
Bendito sea Jehová, Dios, que hoy también nos rodea con su escudo protector
Ilustración
Walter Crane
2 comentarios:
Doy Gracias a al Señor por protegerme siempre, aun cuando he perdido la esperanza. Gracias Clarissa
Francisco, yo también me he sentido así. En ocasiones, cuando miro hacia atrás, me doy cuenta que Él siempre ha estado allí, brindándome su protección.
Hoy es tiempo de reencontrarnos con la Esperanza
Gracias Francisco por acompañarme en esta aventura de fe.
Un abrazo!
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