Él redimirá en paz mi alma
de la guerra contra mí
aunque muchos estén contra mí.
Salmo 55:18
En ocasiones nuestros conflictos personales y las situaciones de crisis nos hacen sentir que todo y todos están en contra nuestra. Este es un sentimiento invasivo que progresivamente nos conduce al abatimiento y la soledad.
El acto de redimir tiene relación con recuperar, rescatar, poner a salvo. Todo eso es lo que Dios, a través de su Espíritu, puede hacer por nosotros, cuando depositamos nuestra confianza en su amoroso cuidado.
¡Él redime en paz tu alma, mi alma!
Ilustración
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