miércoles, 31 de octubre de 2012

Oportuna defensa



Yo sé que Jehová tomará a su
cargo la causa del afligido
y el derecho de los necesitados.
Salmo 140: 12


Sin duda en todas partes del mundo, se ha avanzado muchísimo para construir una sociedad más inclusiva; se hacen esfuerzos por  respetar los derechos humanos; se ha avanzado en  legislación laboral, derechos del niño y hay campañas masivas rechazando cualquier forma de abuso y violencia.
Sin embargo hoy como en los días del salmista, aun hay necesitados, afligidos de corazón, conflictos al interior de las familias y situaciones anónimas de abuso y violencia. Las voces se silencian especialmente cuando se establecen relaciones de poder en forma abusiva, donde los afectados se sienten en riesgo vital.

Pero podemos confiar en nuestro Dios y en esta promesa: "tomará a su cargo la causa del afligido y el derecho de los necesitados". 
El Señor es nuestro mejor abogado y ante su presencia santa todos los seres humanos tiene el mismo valor, "el valor-aliento de vida" que Él mismo puso en el ser humano allá en el comienzo del que nos habla Génesis.
El libro de Hebreos lo dice de la siguiente manera: "acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro"



"Blind"
Harry Holland
pintor británico contemporáneo

martes, 30 de octubre de 2012

La fuerza verdadera



Vano para salvarse es el caballo;
la grandeza de su fuerza
a nadie podrá librar.
Salmo 33: 17

Cuentan que fue James Watt, el matemático e ingeniero escoses, quien en 1782 ideó una medida que llamó "caballo de fuerza", mientras trabajaba en minas de carbón. Su pensamiento inquieto, curiosidad y capacidad de observación lo llevaron a preguntarse cuánta fuerza debía realizar un caballo para movilizar una determinada cantidad de carbón, y lo pensó en términos de rendimiento.

Mucho antes de Watt, en tiempos del salmista (recordemos que los Salmos se encuentran en el Antiguo Testamento, lo cual quiere decir que se escribieron antes del nacimiento de Jesús), ya el caballo brillaba por su nobleza y su potente fuerza. En el campo de batalla el caballo podía significar una  superioridad importante. 

Pero no hay fuerza humana, natural o animal que pueda compararse a lo que Dios puede hacer. Su pronto rescate, su misericordia y su poder están en un plano ilimitado e infinito, imposible de medir.

Recordemos las palabras de Jesús que dice en el Evangelio según San Marcos: "porque todas las cosas son posibles para Dios". Él es la fuerza verdadera.


Pintura: Giorgio Chirico
Grecia
1888 - 1978


lunes, 29 de octubre de 2012

Se levanta




"Por la opresión de los pobres,
por el gemido
de los necesitados,
ahora me levantaré -dice
Jehová-,
pondré a salvo
al que por ello suspira"
Salmo 12: 5

La compasión de Dios no cambia. La pobreza, la necesidad humana, la miseria y la soledad  son motivos para la compasión de Dios. Así lo vemos a través de las Sagradas Escrituras y también lo podemos sentir cuando acudimos a Él con nuestras necesidades.



Pintura: Melinda Cootsona 

domingo, 28 de octubre de 2012

Sonidos en el silencio



¡Cuán grande es tu bondad,
que has guardado
para los que te temen,
que has mostrado
a los que esperan en ti,
delante de los hijos
de los hombres!
Salmo 31: 19


No hay medida alguna con la cual medir la inconmensurable bondad del Señor, Él es la bondad misma. Quizás por eso el salmista usa un signo de exclamación, porque no encuentra un adjetivo apropiado. No podemos medirla o cuantificarla, pero nos asombra. La bondad de Dios está  en todo y en todo momento.

¡Oh Señor, gracias por tu gran bondad!

Pintura: Isabel Guerra

sábado, 27 de octubre de 2012

Rescate amoroso



Muchas son las aflicciones
del justo,
pero de todas ellas
lo librará Jehová
Salmo 34: 19


Me parece que nosotros hoy día tenemos la misma percepción del salmista, en el sentido de que son las personas correctas,de corazón íntegro, las que más sufren en este mundo. Pero no podemos desconocer la misericordia de Dios, que tiene sus ojos puestos sobre todos sus hijos y transforma esas aflicciones en bendición.
Hay una traducción (NTV) que dice: 
"la persona íntegra enfrenta muchas dificultades,
pero el Señor llega al rescate en cada ocasión"

Cuando disponemos el corazón para nuestro Dios, somos justificados a través de Jesucristo;  esta es la razón por la cual podemos estar seguros que de todas y cada una de nuestras aflicciones, el Señor nos rescatará, rodeándonos con su amor, protegiéndonos, consolándonos y bendiciéndonos con su paz.

Esta es una de las oraciones más poderosas que encontramos en las Sagradas Escrituras. Tendremos aflicciones, pero de TODAS ellas nos librará el Señor.


Pintura: Danielle Richard


viernes, 26 de octubre de 2012

Un ofrecimiento




Dios hace habitar en familia
a los desamparados
Salmo 68: 6

La familia es un regalo de Dios. También es un ofrecimiento de Dios para cada persona.
Podemos tener nuestra familia nuclear o disfrutar de una gran familia extendida. Pero habitar en la familia de Dios, sentirnos acogidos, amados, respetados, seguros y en armonía es también un regalo espiritual que Dios ofrece.

Quiero apropiarme de esta oración pidiendo a Dios por nuestros hijos, aquellos que aun no han formado sus propias familias. En el diseño de Dios, el matrimonio, la paternidad o maternidad, son una fuerte de amor donde se suavizan las asperezas diarias de la vida. Se necesita sabiduría divina para tomar buenas decisiones.

¡Oh Señor, gracias por la familia y gracias por tu santo Amor!
Orienta a nuestros hijos para que tomen sabias decisiones,
al forman sus propias familias.


"Desayuno bajo los abedules"
Carl Larsson

jueves, 25 de octubre de 2012

Fortaleza



Los que confían en Jehová
son como el monte
Sión,
que no se mueve,
sino que permanece
para siempre.
Salmo 125: 1


Cuando vivía lejos de Dios pensaba que debía hacerme cargo de mi propia vida, encontrando un camino propio y luchando contra ese sentimiento de inseguridad, debilidad  y temor que a menudo me invadía. A eso lo llamaba responsabilidad. Muchas veces fallaba y entonces me recriminaba pensando que no era lo suficientemente fuerte o lo suficientemente inteligente (¿?)
Hasta que entendí que había puesto mi fe en la persona equivocada. Por mi cuenta, por mis propios medios, estoy destinada al fracaso y la frustración.

Ahora he puesto toda mi confianza en el Señor. Esa  confianza  no solo me trae la bendición de sentirme en paz, sino también un íntimo sentimiento de seguridad.

El salmista compara la confianza en Dios con la fortaleza de una montaña. Es un monte santo  donde hay quietud y serenidad; ese conocimiento nos hace fuertes donde antes eramos débiles.

¡Oh Señor, Tu eres nuestra fortaleza!

Pintura: Kate Winn

miércoles, 24 de octubre de 2012

Por el desierto





¡Aleluya!
...
Al que pastoreó a su pueblo
por el desierto.
porque para siempre
es su misericordia.
Salmo 136: 16

Son muchas, incontables, las misericordias con las cuales Dios pastoreó a todo el pueblo de Israel, en el desierto; una región tan grande en la que no hay provisiones  ni para un solo caminante. Todos sabemos que Dios proveyó protección, sombra durante el día y calor durante la noche, pan, agua y carne. Pero hay otros detalles menos conocidos que hablan de esa misericordia; dice el relato bíblico que estuvieron "durante cuarenta años en el desierto, sin que sus vestidos hayan envejecido... ni su calzado haya envejecido sobre vuestro pie" (c.f. Deuteronomio cap. 39)

En en ámbito espiritual, nosotros transitamos por la aridez del desierto. Pero Dios en su infinita misericordia nos provee protección, alimento, sustento, paz, y todo lo necesario. Nos rodea con su inmenso amor y nos viste con ropajes y calzado apropiado para la marcha.
Quizás el mayor bien es el agua de Vida que brota de la Roca que es Cristo. Mientras caminamos, trabajamos, estudiamos o en cualquier actividad diaria, podemos sentirnos a salvo y seguros porque Él nos brinda su misericordia eterna, la misma que nos conduce a nuestra tierra prometida.


Pintura: Kiéra Malone


martes, 23 de octubre de 2012

Un Tiempo




Diste a mis días término corto
y mi edad es como nada
delante de tí;
ciertamente, es apenas un soplo
todo ser humano que vive.
Salmo 39: 5

Muchos afanes y ansiedades van llenando nuestros días de cansancio y fatiga; especialmente cuando perdemos de vista la fragilidad de nuestra vida.
Hay un texto, cuyo autor desconozco, que puede complementar la reflexión que nos propone el salmista:


"Cada uno de nosotros, tiene un banco cuyo nombre es Tiempo. Cada mañana, este banco te acredita 86,400 segundos. Cada noche, este banco borra, y da como perdido, cualquier cantidad de ese crédito que no has invertido en un buen propósito.
Este banco no arrastra saldos, ni permite sobregiros. Cada día te abre una nueva cuenta. Cada noche elimina los saldos del día. Si no usas tus depósitos del día, la perdida es tuya. No se puede dar marcha atrás. No existen los giros a cuenta del deposito de mañana. Debes vivir en el presente con los depósitos de hoy y consiguir lo máximo en el día.
Para entender el valor de un año, pregúntale a algún estudiante que perdió el año de estudios. Para entender el valor de un mes, pregúntale a una madre que alumbró a un bebe prematuro. Para entender el valor de una semana, pregúntale al editor de un semanario. Para entender el valor de una hora, pregúntale a los amantes que esperan a encontrarse. Para entender el valor de un minuto, pregúntale a una persona que perdió el tren. Para entender el valor de un segundo, pregúntale a una persona que con las justas evito un accidente. Para entender el valor de una milésima de segundo, pregúntale a la persona que gano una medalla de plata en las olimpiadas.
Atesora cada momento que vivas. y atesóralo más si lo compartiste con alguien especial, lo suficientemente especial como para dedicarle tu tiempo y recuerda que el tiempo no espera por nadie. Ayer es historia. Mañana es misterio. Hoy es una dádiva. ¡Por eso es que se le llama el presente!"



Oh Señor, 
enséñanos de tal modo 
a contar nuestros días
que traigamos
al corazón
sabiduría
(Salmo 90: 12)


Pintura: Yana Movchan

lunes, 22 de octubre de 2012

Reconocimiento



Me postraré
hacia tu santo Templo
y alabaré tu nombre
por tu misericordia y tu fidelidad,
porque has engrandecido
tu nombre
y tu palabra sobre todas las cosas.
Salmo 138: 2


Dios y su Palabra permanecen fiel a través de los tiempos y de la historia; sus promesas  están respaldadas por su precioso nombre.
El salmista nos invita a la adoración porque ha experimentado y reconocido la fiel misericordia de Dios en su vida.
La decisión de alabar a Dios, honrar su nombre en adoración, siempre nos reportará mayor beneficio que cualquier otra oración, porque nos sitúa en la dimensión que nos corresponde  frente a la grandeza de Dios. Postrarse, inclinar el corazón en humildad y adoración a Dios es también una manifestación de amor; un amor que Él mismo ha puesto en sus hijos.

Oh Señor, danos más sensibilidad para reconocer 
tu misericordia y grandeza en nuestras vidas.
¡Recibe hoy nuestra adoración!

"Niña con flores"
Henri Martin
Francia
1860 - 1943

domingo, 21 de octubre de 2012

Sobre todas las naciones



Excelso sobre todas las naciones
es Jehová,
sobre los cielos su gloria
Salmo 113: 4

Excelso sobre todas las naciones. Pocas veces podemos meditar en la universalidad de Dios, su poderío y su dominio sobre toda su creación, sobre todas las naciones.  El salmista aquí nos invita a rendirle tributo a nuestro Dios, que es santo, eterno y por supuesto, no conoce límite ni frontera.
Es sólo el amor y la misericordia de Dios lo que nos ha permitido conocerlo. El profeta Oseas describe la relación Dios-hombre diciendo que es Dios quien toma la iniciativa:  "Lo atraje con cuerdas de ternura, lo atraje con lazos de amor". Ese amor y esa ternura es para todo ser humano, porque se extiende sobre todas las naciones.

Si, Dios es excelso, eterno y sublime, como es también excelso y sublime su Amor por toda la humanidad.


Pintura: Felix Vallotton
Suiza
1865 - 1925

sábado, 20 de octubre de 2012

La prueba




Jehová prueba al justo;
pero al malo y al que ama la violencia
los repudia su alma.
Salmo: 11: 5

Sin duda es mucho más agradable hablar del amor de Dios, de su misericordia y bondad (que son reales) antes que hablar de Dios y su sentido de justicia. Especialmente porque no nos hallamos en el paraíso, sino transitando en nuestro propio desierto.
A cada paso se presentan dificultades y "pruebas", que son circunstancias que van templando nuestra espiritualidad y nos pueden ayudar a mantener nuestra oración en alto; como un  diálogo activo con nuestro Dios y Padre, quien en todo momento nos sustenta.

El Apóstol San Pablo nos recuerda que "fiel es Dios, que no os dejará ser probados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la prueba la salida, para que podáis soportarla"


"En busca del Paraíso"
ilustración de Lim Heng Swee

viernes, 19 de octubre de 2012

¿Quién...?




¿Quién como Jehová,
nuestro Dios,
que se sienta en las alturas...?
Salmo 113: 5


¿Quién como Jehová, nuestro Dios?  No hay una respuesta para esta pregunta tan directa. No hay respuesta porque nadie puede ser comparado,  ni por un solo instante, con el único y Todopoderoso Dios viviente.
Tampoco podemos explicar el inmenso y santo amor de Dios, que desde las alturas se inclina para escucharnos. En este sentido, Dios ha tomado la iniciativa y se ha dado a conocer, se ha revelado a través de Jesucristo. A esto se refiere el Apóstol San Juan cuando dice: "nosotros le amamos a Él, porque Él nos amó primero"

¡Oh Señor, Tú eres nuestro Dios y Padre, Todopoderoso!


Imagen tomada de la web

jueves, 18 de octubre de 2012

La mano que sostiene



Cuando yo decía:
"Mi pie resbala",
tu misericordia, Jehová,
me sostenía.
Salmo 94: 18

Una de las características más sobresalientes y maravillosas de los salmos es que son la expresión sincera y honesta de quien ora, sin ocultar ninguna de sus emociones; sin atribuirle a esas emociones un carácter de "buenas" o "malas". Es sencillamente la desnudez del alma ante su creador, día y noche, constantemente.
Por otra parte Dios manifiesta su misericordia, que no deja de sorprendernos, acogiendo la alabanza, el gozo, la alegría y la gratitud y de igual modo, los temores, el enojo, la tristeza y las dudas, por nombrar las emociones más frecuentes.

En este verso la voz del salmista nos permite meditar en el cuidado amoroso de Dios y su protección. Un amor inagotable que no depende de nuestros estados de ánimo, ni del tiempo; siempre es. La mano potente de Dios nos sostiene en todo momento.

En ocasiones tenemos plena conciencia de cómo Dios nos sostiene, y nuestra fe se ve fortalecida; pero la gran mayoría de la veces no alcanzamos a percibirlo, incluso pensamos como el salmista "Mi pie resbala"; y luego al mirar hacia atrás llegamos a la misma conclusión:  el Señor me sostenía.


Pintura: Daniel F. Gerhartz
nacido en 1965
artista estadounidense


miércoles, 17 de octubre de 2012

Mi defensa



De tu presencia proceda
mi defensa;
vean tus ojos la rectitud
Salmo 17: 2


Nada hay en nosotros mismos que nos haga dignos del Amor de Dios. Es sólo la gracia, el perdón y la cruz de Cristo lo que nos da la justificación y una apropiada y total defensa. El Apóstol Pablo lo dice de la siguiente manera, en su carta a Los Romanos:
"Justificados pues por la fe, tenemos paz para con Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo"

 Es el Creador del universo, Dios Eterno, quien nos puede declarar  inocentes y nos hace parte de su reino. Esto no nos vuelve inmunes a la crítica, el dolor, la tristeza  o la enfermedad, pero nos permite vivir con esperanza, bajo la protección divina. En los tiempos difíciles podemos imitar al salmista que, sintiéndose acosado  e inseguro, mantiene en alto su oración y apela en los cielos, su defensa en la tierra.

¡Gracias Señor por tu amor eterno!





Fotos: Playa Cheuque
Región de la Araucanía, Chile
(Gracias Víctor)


martes, 16 de octubre de 2012

De todo lugar



Por tanto, los habitantes
de los confines de la tierra
temen ante tus maravillas.
Tú haces alegrar las salidas
de la mañana y de la tarde
Salmo 65: 8

Dios tiene dominio sobre toda la creación, sobre todo lo que existe. Esto ya es un hecho maravilloso; pero lo más conmovedor es que Él sigue sosteniendo el curso de los días y de nuestra vida, sin importar el sitio geográfico donde nos encontremos.


Tu haces alegrar las salidas de la mañana y de la tarde. Esta frase del salmista, tan llena de belleza y poesía, me recuerda que junto con cada nuevo día, Dios nos regala la posibilidad de renovarnos, de volver a comenzar, sin importar nuestra edad: ya sea la mañana o la tarde en la línea de tiempo de nuestra vida. Sólo es necesario disponer el corazón para Él, reconociéndolo como  Creador, Dios y Padre Todopoderoso.

¡Oh Señor, llénanos hoy con la alegría de tus maravillas!



Pintura: Boris Grigoriev
1886 - 1930
Rusia

lunes, 15 de octubre de 2012

Firmes en la esperanza



Así que, ¡sean fuertes y valientes,
ustedes los que ponen su esperanza en
el Señor!
Salmo 31: 24
(NTV)

Creo que vale la pena tomar la recomendación del salmista con valentía, y mucha fuerza,  poner nuestra esperanza en el Señor, Dios Todopoderoso.

Recientemente estuve en una exposición de pintura local.
En una de las obras expuestas se leía:
"Señor creí dártelo todo...
pero siempre faltó algo...
¿Por qué tú en cambio 
me das la gracia completa?"

¡Esforzaos... tome aliento vuestro corazón!
Salmo 31: 24



Pintura: Walter Bayes
1869 - 1956
Inglaterra

domingo, 14 de octubre de 2012

La mayor honra



Sepan que el Señor
honra al que le es fiel
Salmo 4: 3

Este salmo 4 es un salmo de David. Me parece maravillosa la seguridad con la que David nos dice que Dios honra al que le es fiel; en otra versión leemos "Jehová ha escogido al piadoso para sí".
David tenía esta certeza por la experiencia de haber sido escogido rey de Israel, según un decreto divino. Nosotros hoy podemos apropiarnos de este verso porque tenemos la experiencia de ser el pueblo de Dios por la misma razón: un decreto divino que nace del amor y la misericordia de Dios.

La segunda parte de este verso dice: 
El Señor me escucha cuando lo llamo.
¿Puede haber mayor honra que esta, la de ser escuchado (o escuchada) por el Señor del universo?

Oh Señor, llena hoy nuestro corazón de la certeza de ser escuchados por Ti

Pintura: Teodor Axentowicz

sábado, 13 de octubre de 2012

En la espera



El menesteroso
no para siempre será olvidado
ni la esperanza de los pobres
perecerá perpetuamente.
Salmo 9: 18

En muchos sentidos todos somos pobres y menesterosos, porque tenemos diversas carencias; muchas de ellas nada tienen que ver con recursos económicos.

Cuando reconocemos que podemos ser perfeccionados o "completados" en el santo Amor de nuestro Señor, nuestras perspectivas cambian. Llegamos a entender que Dios nos hace parte de "las riquezas de su gloria". Pero en las circunstancias del presente, en lo cotidiano, todavía nos cuesta el ejercicio de la fe. Nos cuesta esperar y dar espacio a lo que Él puede hacer en su sabiduría y misericordia. 
Dios nos invita a confiar en que Él suplirá todas nuestras necesidades, por eso muchas de nuestras oraciones tienen relación con peticiones; pero olvidamos un detalle importante: estar quietos y esperar. Este es el verdadero ejercicio de la fe, recordando que el menesteroso no para siempre será olvidado.

Esperar y confiar es, en última instancia, entender que Dios mismo nos sostendrá en la espera, porque a su tiempo tendremos una respuesta.


Pintura: Angelo Morbelli
Italiano
1853 - 1919

viernes, 12 de octubre de 2012

Esperanza viva



Me has guiado según tu consejo,
y después me recibirás en gloria.
¿A quién tengo yo en los cielos
sino a Ti?
Salmo 73: 24 y 25

Nuestra esperanza, al igual que para el salmista, está puesta por completo en el Señor.

Esta es una buena ocasión para dar gracias por la vida que es un regalo y pensar con esperanza y serena quietud en el término de nuestros días aquí en la tierra, porque nuestra vida tiene un  final feliz en los cielos.
Pero es la pregunta del salmista ¿A quién tengo yo en los cielos
sino a ti? lo que nos hace pensar en algo que parece obvio pero en realidad tiene un gran sentido: El cielo no es el cielo que esperamos, si Dios mismo no está allí. Es la presencia de Dios y estar a su lado lo que hace que el cielo sea realmente cielo. 
La gloria no es sino el estar más y más cerca de nuestro Dios y Padre

¡Oh Señor, Tú eres nuestra Esperanza viva!

Pintura: Vincent Van Gogh

jueves, 11 de octubre de 2012

¿Por qué...?




¿Por qué estoy desanimado?
¿Por qué está tan triste mi corazón?
¡Pondré mi esperanza en Dios!
Nuevamente lo alabaré,
¡Mi Salvador y mi Dios!
Salmo 42: 5
(NTV)


Este verso ya lo conocemos en la versión tradicional, pero me ha parecido que aquí (Santa Biblia versión Nueva  Traducción Viviente) podemos encontrar nuestra propia voz, palabras de uso cotidiano que nos llevan a la misma profunda reflexión que en el verso  más conocido: "¿Por qué te abates, alma mía...?... espera en Dios... ¡Salvación mía y Dios mío¡"

Por otra parte este verso me representa muy bien. Tengo a menudo esos cambios  de ánimo, por eso digo: 
¡Pondré mi esperanza en Dios!

El Señor nos rescata del desanimo y la tristeza y nos llena de su paz; cuando el corazón hace memoria de la misericordia de Dios, la alabanza surge en forma espontánea.
¡Oh Señor eres mi Salvador y mi Dios!



Pintura: Sophie Gengembre Anderson
Francia 
1823 - 1903

miércoles, 10 de octubre de 2012

Los pensamientos



Que todos mis pensamientos le agraden,
porque me alegro en el Señor.
Salmo 104:34

Esta es una sencilla pero honesta oración. Tenemos que reconocer, junto al salmista, que ante Dios nada queda oculto. Lo más íntimo que tenemos son nuestros pensamientos, y son los pensamientos los que producen emociones y luego las emociones nos llevan a las acciones. Cambiar nuestros pensamientos y enfocarlos en nuestro Señor nos puede ayudar a vivir más contentos, más en armonía con nuestro ambiente y por supuesto honrando a Dios, nuestro Padre.

¡Que todos mis pensamientos te agraden, Oh Señor!

Pintura: Steve Hanks

martes, 9 de octubre de 2012

Voz de júbilo




Voz de júbilo y de salvación
hay en las tiendas de los justos;
la diestra de Jehová hace proezas.
Salmo 118: 15

Es probable que este verso sea una alusión al paso del pueblo de Israel por el desierto, cuando ellos habitaban en tiendas y la dependencia de Dios era completa. Sustento, protección y dirección recibieron a diario de formas extraordinarias.

El Señor sigue sustentando a su pueblo, a sus hijos y a todos los que en Él confían. Su mano derecha es la que hace proezas. Él es nuestra habitación espiritual y continua dándonos sustento, protección y dirección, cada día. El salmista nos invita a no perder de vista estas proezas y elevar una canción de alabanza y gratitud.

¡Oh Señor, Tú eres la alegría de nuestra alma!



Pintura: Anton Refregier
artista de origen ruso
1905 - 1979


lunes, 8 de octubre de 2012

En ciudad fortificada



Bendito sea Jehová
porque ha hecho maravillosa
su misericordia para conmigo
en ciudad fortificada
Salmo 31:21

Cuando Dios nos ha bendecido no podemos menos que bendecirlo.

¿Cómo se bendice a Dios? ¿Cómo podríamos bendecir a quien está por encima de todas las cosas? ¿No suena pretencioso...?
Pero bendecir el nombre de Dios es una idea que expresan varios salmos, por ejemplo: "Bendice alma mía a Jehová y no olvides ninguno de sus beneficios" (103).

Quizás no podemos bendecir al Señor en el sentido de ofrecerle una gracia o favor; pero tomando en cuenta otra acepción de la palabra "bendecir", como bien-decir, podemos ofrecerle a Dios nuestros más hermosos elogios y alabanzas.

Aquí el salmista dice que Dios ha hecho maravillosa su misericordia... en ciudad fortificada. La bendición de Dios crea sobre sus hijos una muralla, cual una fortificación, sacándonos de nuestra miseria. Esta es una gran razón para bien- decir el nombre de nuestro Dios y Padre.

Oh Señor, bendecimos Tu nombre el día de hoy.
¡Bendito seas por la eternidad!

Pintura: Lee Bogle


domingo, 7 de octubre de 2012

Expresiones de amor




Alzaré asimismo mis manos
a tus mandamientos que amo
y meditaré en tus estatutos
Salmo 119: 48

Es por amor que Dios estableció sus mandamientos y es por amor que Él espera que los cumplamos.

El salmista expresa en este salmo 119, una y otra vez su apego a los mandamientos de Dios. En esa oportunidad une el sentido práctico con la meditación. Alzar las manos a los mandamientos es poner en acción lo que Dios ha establecido como su Ley moral. Meditar en ellos es darle el valor espiritual que estas acciones tienen. En definitiva, si Dios estableció sus mandamientos como la guía práctica de orden y sana convivencia, cuando los guardamos con el corazón y con las manos, entramos en ese terreno con expresiones de amor por su sabiduría, justicia y santidad. De esta manera vamos dejando las huellas del Espíritu de Dios en lo que hacemos. Esto es honrar al Señor y Dios del universo.

Ilustración: Roberto Weigand

sábado, 6 de octubre de 2012

Los ojos




Mira, Dios, escudo nuestro,
y pon los ojos en el rostro
de tu elegido.
Salmo 84: 9


La mirada de Dios. ¿Qué ve Dios cuando nos mira?
En el tiempo de mi niñez, muchas veces tuve miedo de Dios, especialmente cuando alguien me dijo que Dios siempre estaba mirándonos y que si hacía algo malo Dios me castigaría.
Por mucho tiempo tuve esa idea de Dios: un ojo, al más puro estilo egipcio, siempre amenazador, siempre acusador y 
siempre dispuesto al castigo.

Los santos Evangelios nos hablan una y otra vez de la mirada compasiva de Jesús, fiel reflejo del Padre Dios. Es conmovedor leer el efecto que esa mirada tenía en las personas. Cada vez que Jesús sostenía algún encuentro personal, era su mirada la que traspasaba el alma de esa persona. El amor de Dios así derramado, provocaba reacciones espontáneas; nadie quedaba indiferente, y nadie podía continuar con su propio estilo de vida.

La mirada de Dios,  es una mirada de compasión, de perdón y de encuentro. Cuando acudimos a Él, Dios nos mira y ve lo que puso en nosotros al  crearnos. Cuando Dios nos mira se completa el circulo de comunicación y de amor perfecto. Ese circulo es impenetrable: un escudo nuestro.

Oh Señor, míranos hoy con Tu misericordia.




Pintura: David Hockney

viernes, 5 de octubre de 2012

Por sus nombres



Él cuenta el número
de las estrellas;
a todas ellas llama por sus nombres.
Salmo 147: 4

Existen culturas en el mundo en que cada constelación de la bóveda celeste, representaba a un dios. Aquí el salmista nos dice que el Señor es el Dios de todas las estrellas.
Quiero pensar además, que el salmista tiene en mente la promesa que Dios le hizo a Abraham: Una descendencia tan grande e incontable como las estrellas. En este sentido los cristianos somos también herederos de aquella promesa, si creemos que somos el pueblo de Dios, y podemos decir que Él conoce el nombre de cada uno de sus hijos.

Es abrumador pensar que Dios conoce el nombre de las estrellas, especialmente si consideramos que aun con toda la tecnología existente, todavía quedan regiones en el campo celeste, constelaciones y estrellas, que se hallan más allá de los límites de la visión humana. 

¡Oh Dios Todopoderoso, Creador y Sustentador del universo!


Ilustración: Bernhard Oberdiesk


jueves, 4 de octubre de 2012

Para exaltar a Dios





Exalten a Dios con sus gargantas
y con espadas de dos filos
en sus manos
Salmo 149: 6


El salmista pone la alabanza y exaltación a Dios en el mismo contexto de la espada de doble filo; como queriendo significar las armas del creyente-soldado: en la mano tiene la poderosa espada que es la Palabra de Dios, y de su garganta brota el canto de alabanza que hay en su alma, un canto que anuncia  la victoria. 


El espíritu del creyente está quieto y sujeto a la soberanía de Dios, pero de su boca brota con fuerza el canto que proclama su fe, poderosa e irresistible; el canto que glorifica a Dios.



Imagen tomada de la web

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